Creo que ya había hablado del método que estoy
empleando para darle orden a las canciones dentro del “trabajo”, pero no lo
había hecho con muchos detalles. En esta entrada voy a compartir la imagen del “Gebüede”
para detallarlo un poco más.
A la fecha tengo ocho canciones, estas han ido variando. Hace poco agregué la numero siete y ocho por esto aún están en “obra negra”; todavía no he decido incluirlas definitivamente… y todo lo definitivo sí que está siendo un problema acá. Me baso en el modelo de Alexander Scriabin: “él se jactaba de poder oír colores. Skriabin se vio fuertemente influido por la habilidad sinestésica en su obra musical. Su principal virtud fue asociar cada tonalidad con un color determinado, creando así un modelo. Su sistema de colores, a diferencia de la mayoría de las experiencias sinestésicas, se ordena según el círculo de quintas. Nótese que Skriabin, según sus estudios teóricos, no reconocía diferencias entre una tonalidad mayor y otra menor con el mismo nombre, (por ejemplo: do mayor y do menor). Muchos de los trabajos de Skriabin en esta materia están influidos por doctrinas teosóficas.
Fundamentalmente me paro en este modelo para darle un orden lógico a las canciones dentro del Gebaüde; me gustaría tener la capacidad de relacionar los sentimientos con colores para ser más fiel al modelo en el momento de componer y producir cada canción, pero creo que no la tengo. Sin embargo, esta relación lógica me da tranquilidad porque hace que el Todo tenga una coherencia, y de alguna manera cada pieza esté hilada a la anterior y a la siguiente.